El museo más importante de Francia y el más visitado del mundo. Cada año recibe más de 8 millones de visitas.
Ubicado en el antiguo Palacio del Louvre, una fortaleza del Siglo XII que ha sido reformada y ampliada en distintas ocasiones. Antes que se convirtiera en museo, algunos monarcas como Carlos V o Felipe II utilizaron el palacio como residencia real en la que acumulaban sus colecciones artísticas.
La colección del Louvre tiene aproximadamente unas 300.000 obras anteriores a 1948, de las que se exponen unas 35.000.
La inmensa colección se organiza temáticamente en diferentes departamentos: antigüedades orientales, antigüedades
egipcias, antigüedades griegas, romanas y etruscas, historia del Louvre y
el Louvre medieval, pintura, escultura, objetos de arte, artes gráficas
y arte del Islam.
Entre las pinturas más importantes del museo merece la pena destacar las siguientes:
- La Gioconda de Leonardo da Vinci.
- La Libertad Guiando al Pueblo de Delacroix.
- Las Bodas de Caná de Veronés.
- La Coronación de Napoleón de Jacques-Louis David
Entre las esculturas las obras más sobresalientes son:
- La Venus de Milo de la Antigua Grecia
- El escribá sentado del Antiguo Egipto
- La Victoria Alada de Samotracia del periodo Helenístico de la Antigua Grecia.
- El Esclavo Moribundo de Michelangelo Buonarrotti
- Psique de Antonio Canova
Es digno de visitar, aunque para verlo entero deberemos emplear más de dos días. Si vas con tiempo justo, invito al menos a entrar y ver las obras más importantes que he comentado con anterioridad. Si bien es cierto que la Gioconda es el cuadro más atrayente del Museo, la verdad es que a mi me decepcionó bastante, un cuadro pequeño, resguardado por un inmenso cuadro y custodiado por una enorme cristalera. Para mi gusto la Virgen de las Rocas, por ejemplo, es más impresionante. Pero para quién no la haya visto invito a su paso por la galeria en la que está sólo, custudiada por las Bodas de Caná.
Quién haya estado en parís, y quién haya leído el libro del Código Da Vinci, se maravillará de las Pirámide que hay en el museo. Una en la entrada y la otra en su interior, la conocida Pirámide Invertida.
La situada en el patio del Museo que da acceso al edificio a través de las Tullerías fue diseñada por el arquitecto Ieoh Ming Pei. De estilo internacional es una pirámide de vidrio y aluminio inaugurada en 1989 por el presidente francés François Mitterrand.
Tiene una altura de 20,6 m. y un total de 673 paneles de vidrio laminado transparente divididos en 603 rombos y 70 triángulos. El peso total de la estructura es de 180 toneladas. La inclinación de
sus paredes, al igual que ocurre con las pirámides egipcias, es de 51
grados.
Su centro de gravedad coincide con el de los tres pabellones del
museo, Richelieu al norte, Denon al sur y Sully al este. Siendo ésta la
principal y más grande de las pirámides de cristal del museo, que
incluye, a nivel subterráneo, otra pirámide pero invertida, está no puede verse desde el exterior, pero si nos situamos en el Arco del Carrousel y miramos la Pirámide principal, nos encontramos a mitad de camino una rotonda que aparentemente parece una rotonda cualquiera, que tiene en su circunferencia unos setos de
aproximadamente un metro de altura y son los que enmarcan la
base cuadrada de la Pyramide Inversée.
Justo debajo de la estructura modernista de cristal y acero, se construyó una pequeña pirámide de piedra que deja de separación entre ambos vértices el espacio aproximado de una cabeza.
Rotonda en la que está situada la pirámide invertida |
Antes de
construirse la pirámide, la entrada al Louvre tenía unas largas colas.
Con su construcción, además de solucionarse el problema, se aumenta el
espacio de exposición del museo. Hasta 1997 por los cristales de la
pirámide del Louvre se podía ver el metro de Francia.
Desde su construcción, la pirámide ha estado sujeta a polémicas, debido
al contraste de estilos entre la modernidad del vidrio y el clasicismo
del museo, si bien ha servido de inspiración para las ampliaciones de
muchos otros museos. Ha sido descrita por algunos detractores como parte
del "complejo de faraón" de Miterrand. Otros alaban la yuxtaposición
del contraste entre estilos arquitectónicos como una exitosa combinación
entre lo antiguo y lo nuevo, lo clásico y lo ultramoderno. En mi opinión es una mezcla fantástica y realmente bella que impacta a cualquier visitante.
http://www.louvre.fr/
Eva, sencillamente PRECIOSO tu reportaje por el museo.
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